ENGORDAR POR NO COMER….

Tengo una amiga (compañera de curro), que es mi fan numero uno leyendo los disparates que escribo, aunque el otro día me comentó que últimamente mis blogs se estaban volviendo muy serios y filosóficos.

Pero… ¿quién puede ver lo cómico de la vida ante los acontecimientos ocurridos en esta semana? Se puede decir que dejar de ser seria en estos momentos, supone un gran esfuerzo para mí, aunque no un imposible.

En la hora del desayuno, solemos bajar a las maquinas expendedoras, a tomarnos un cortadito o un sándwich (en mi caso medio) que está mas frío que las patas de un pingüino (omito muerto porque estos dias no es politicamente correcto). Después de habernos servido, empezaron a llegar el resto de los compañeros. Uno de ellos, bastante fuertote por cierto, saco de la máquina un dulce y mientras se lo comía, otro le increpo entre bromas y veras, si esa era la forma en la que pretendía bajar peso. Bueno… ya se pueden suponer en lo que desemboco esto, máxime si estoy yo presente, la defensora de los gordos que hace apología de su rellenez, gordura u obesidad. Un debate sobre el sobrepeso y las formas para bajar este sin pasar hambre. Los alimentos que hay que comer más. Cuantas veces al día y de que manera. Repartir lo que comes en mas veces y menos cantidad. Dejar preferentemente los carbohidratos y dulces para el desayuno, porque es lo primero que se quema... y cenar ligero o casi nada.

Esto me hizo reflexionar sobre el porque de mi subida de peso en estos ultimos años. Puedo afirmar con rotundidad, además de que no lo niego, que yo engordo por no comer.... pero por no comer con fundamento.
Una una vez asumido que soy una rellenita crónica, me vino a la mente la idea de crear un blog anecdótico sobre mis peripecias o atracones nocturnos.

Empezaré contando mis costumbres alimenticias (no muy sanas por cierto) y como todo relato tiene un inicio empezare por el principio, o lo que es lo mismo, el desayuno.

Suelo hacerlo en casa y antes de salir para el trabajo. Consiste en un señor cortado de leche condensada, mas leche que cafe ¿para que andar con miserias?, y nada más. A las diez, como ya comenté, bajamos la compañera y yo a la maquina expendedora, ella se toma un manchado y yo me espeto medio sándwich, el otro medio lo regalo, no porque engorde, por la mañana la comida fria me sienta fatal.

Almuerzo entre la una y media y dos de la tarde (también en casa). Como actualmente estoy sola, como lo que pille y poca cantidad. Si me escedo, me da la “mamorra” como decía mi difunto padre y no levanto cabeza en el trabajo por la tarde (tengo horario partido). El tiempo que tardo en este menester (o sea comer), es menos de cinco minutos si no hay fruta, porque en vez de comer engullo. Cinco minutos son, si hay fruta y seis minutos si la fruta es uva, porque pierdo algo de tiempo al escupir las pepitas o la piel inmasticable.
La merienda la salto por dos razones, falta de tiempo y poca costumbre.

Y así llegamos a la cena.
Después de hacer todo lo habido y por haber, atender las necesidades de mi madre, preparar las vestimentas y demás cosas para el siguiente día, no me apetece para nada meterme en la cocina y hacer una cena con fundamento. Yo tiro por el camino más fácil que son los carbohidratos, faciles de preparar y rapidos de comer. Sándwiches, tostadas con lo que tenga mas a mano, Pringles Onion (papas de tubo con sabor a cebolla), helados en su versión mini. Todo ello regado con un quintito de Stemburg ahora que estamos en verano.

Eso cuando estoy cansada y me duermo rapida y profundamente. Cuando me cuadra un dia estresante, con insomnio, es otra historia. No paro de abrir la nevera y los módulos de la cocina, hasta que me quedo tiesa en la cama.

Pongámonos en situación…

Yo, la menda lerenda, con ojos abiertos como una lechuza, sin sueño alguno y sin esperanzas de que Morfeo me haga una visita…Televisión encendida, dedo gordo hecho polvo de tanto zapear, cuadra el insomnio con que no sirve nada de lo que están dando. Vamos a intercalar el zaping con la DS a ver si me canso y el ventilador refrescándome las patas. De repente y sin previo aviso, una bombilla se enciende en lo alto de mi cabeza.... Salto de mi cama de IKEA de un metro de altura y sigilosamente, sin encender la luz (pa no despertar a la mamma) y la Xiqui (que es muy lista y sabe a donde voy) pisándome los talones, me dispongo a atracar la cocina (solo me falta el pasamontañas).

Abro la nevera. Una primera visual abarca de una vez el perimetro de la misma. No veo nada que me llame la atención. A ver si agudizando otro sentido... Meto las narices, olisqueando como un raton a ver si encuentro algo olorosamente apetecible...nada. Al final me decido por unas salchichas de pavo-pollo que tengo en la puerta del frigorífico. Rompo el embase con los dientes y con los dedos agarro una salchicha. Sin el paso previo por plato o utensilio similar, directamente le inco los dientes y mastico... Un trocito pa la Xiqui…Me quedo pensativa. Me voy al armarito donde esta la mostaza y le pongo un poco en la punta de lo que queda de la mezcla carnica, en silencio, rezo para tener suerte y que no me churretee el brazo. Me lo meto en la boca.... "Mmmmmmmm... no esta mal”. Vuelvo a la nevera. Otra salchicha. Esta vez con kepchup Libbis, para experimentar otros sabores. Trocito a Xiqui que me mira con ojos desconsolados. “Ya ta Xiqui” susurro y me lavo las manos.

Jooo! No tengo sueño aún. “Ahora algo dulcito para quitar el sabor de la salchicha", le digo a mi perra, como si el pobre animal entendiese lo que le digo y me fuese a contestar. Yo creo que entiende, porque no se mueve del sitio y no deja de menear el rabo súper contenta. De vuelta a la nevera a por la leche… “¡Yo que no quería ensuciar nada!”. Vaso de leche a templar al microondas, con un poco de azúcar. No se en donde oí que la leche caliente y dulce es un somnifero natural.

¡A ver si me entra sueño de una buena vez! . "Así esta mu sosa ...¿ que le puedo poner?. ¡Ya! Abro otro modulo y ¡Chasssss! una cucharada sopera de la papilla que le doy a mi madre en el desayuno. Plof! Plof! (sonido de espeso) ."¿Y si troceo una galletas Mc Vitie's ?…Mmmmmmm… rico...rico” “Coño! no caben…””Xiqui toma este trocito “.

Me quedo pensativa con el trozo de galleta en la mano. – “pensamiento: he oído en algún sitio que no esta bien que se le de chuches a los perros”. Mientras la Xiqui se me queda mirando como diciendo…”No pienses chorradas y suelta ya la galleta de una vez” “¡Bah! Un día es un día…¡Toma mi niña linda!”…Xiqui contentísima.

¡Aaaaaaaahhhhhhhhhhhhhaaaaaaaaaoooooooaaaaaaaaahhhhh! Gran bostezo….. Limpio lo que ensucie, mientras pestañeo. Voy al baño, hago un pis y me subo a mi altisima cama. Dos minutos despues, despego de la tierra con dirección al planeta de los sueños (o las pesadillas según lo que toque ese día), muy segura en los brazos de Morfeo.

Ya ven porque digo que engordo por no comer…. jejejejejejeje

.... Por no comer con fundamento.