miércoles, 28 de marzo de 2007

DE COMPRAS EN EL MERCADONA


No se si lo habré dicho, pero mi madre en el año 2004 sufrió un infarto cerebral de tipo vascular… (Un ICTUS según HOUSE. En otro momento hablaré del morbo que me provoca HOUSE). Mi madre era SUPERMAMA. Llevaba la casa con mano firme, como si de un ejercito se tratara y ella fuera el CORONEL-GENERAL (no se cuanto manda pero creo que es mucho según la tele). Le enfermedad de mi madre, trajo consigo que recayeran en mi, responsabilidades que antes no tenia (la única era hacer el vago. ¡Uy! se termino el chollo), una de ellas es ir al súper a comprar comida. Y digo yo… ¿para que coño una compra comida si al final termina en el mismo sitio? En el desagüe, .usease, la cagamos hablando en castellano.

No se ustedes, yo voy de compras después de salir del curro. Para mi es mas fácil, ya que sigo el ritmillo estresante de la oficina, vamos, como si fuera un motor de un coche viejo, mientras no lo pares, funciona. Lo más complicado de la compra es el antes. Sacarle la pasta a Dña. Carmen, que después del Ictus (que fisno suena), se ha vuelto devota del Santo Del PUÑO CERRADO (yo creo que siempre lo ha sido pero lo disimulaba muy bien).Que últimamente se me parece al juez del caso Malaya y yo no soy Roca. Pregunta inquisitiva de mi madre: ”¿otra vez a comprarrrrrr?”…¡¡Pues no coman, coño!! o se creen que estoy enganchada al shoping.

“A verrrr, mmmmm tanto pa comida, tanto pa higiene. Mmmm, más o menos. ¡Maaaaaa déjame 150 ebros….! Y me da 250, es que según ella no se ha hecho aun a la moneda.

Llegó al trabajo y antes que llegue el jefe, me hago mi listita con el ordenador, queda mas chulo, no veas como presumo en el MERCADONA de lista…”anda…la mía esta hecha con Word con cuadritos pa tachar y todo”.
A ver, agua, leche, galletas sin, galletas con, atún sin, atún con.” Toda la lista ordenada por llegada desde el aparcamiento. Imprimo la lista. Llama mi hermana Carmen... “no te olvides de comprarme una tableta de chocolate sin azúcar. Una golosinita mujer.”. ¡Coño! No podía haber llamado antes?. A repetir la lista

Seis menos cinco. Empiezo a recoger la mesa. Voy al baño. No es cómodo ir al MERCADONA meandose una, ir al baño allí es una perdida de minutos y mi tiempo es oro.

Salgo al coche disparada. Adiós, adiós, hasta mañana, mañana. Carretera y manta, tomo la autopista para llegar al MERCADONA del barrio. No pierdo el ritmo, aparco…a ver si hay suerte y pillo el aparcamiento que esta al lado del de minusválidos. Luego el carro pesa y termino molía ¡Que suerte! Un carro sin enganchar, más segundos ahorrados, luego los pierdo al llamar al ascensor. “Si lo sé, cojo el carro arriba. Paso por las cajas…”luego nos vemos chicas...digo mentalmente” y miro el reloj…¡zas…zas..! soy una maquina con el carrito. Papel higiénico, servilletas, por ese pasillo no que están las papas y tengo HIPERTENSION, el agua…¿a ver que pescado hay? No, no me llama ninguno la atención.
Para las neveras a comprar el SALTO pa mi hermana. ¡Joder! las tarrinas de helado me están llamando. Mmmmmmmmmm. No hay manera de bajar de peso si vas dos días a la semana al MERCADONA. Doy un rodeo para evitar tentaciones y ya son minutos que pierdo. Fruta, cebollas, lechuga, tomate. Mirarlas bien, por si se cuela una podrida. ¡Que coño! No puedo perder tiempo, si me cuelan una la tiro, que bastante me ahorro con los productos HACENDADO y el BOSQUE VERDE. Estoy en los yogures, Ños! ¡Que postres ha sacado La Reina! ¡Para que digan de las tentaciones de El Eden y las de Jesucristo! Si en aquel tiempo hubiera existido un MERCADONA, LA BIBLIA se hubiera tenido que reescribir.

Pasé el segundo obstáculo. Llego al pasillo de las carnes. ¿Lomo adobado o al ajillo?...joderrrr¡¡Seis ebros por una bandeja de carne, que te comes en dos minutos y cagas en cinco! A ver como esta el puesto de la chasina? Mmmmmm, mucha gente, va por el 25 y en el dispensador asoma el 40. Me voy a la nevera de los envasados y agarro un vacio de queso amarillo. En frente tercera tentación. Refrigerador de las delicatenstes como dice mí hermano. Miro para delante como un burro con orejeras. Y por fin llego a zona de productos de limpieza. ¡ohhhhhhhhh! ¡Orgásmico!. Champús de todas clases, acondicionadores para todo tipo de pelos. Vamos a verrrrrrr. Necesito jabón líquido de ropa. Esta el de jabón de Marsella, para ropa blanca, ropa de color, gel eliminador de olores. Y luego los suavizantes, de colonia, de talco, de avena, floral, para activar el color. ¿Y esos ambientadores?. De lavanda, Frescor Marino. ¡Anda! ¡Que pijo este pa el coche!. Sorteo como puedo los traspaleos que hay en medio y llego a la caja caja, miro el reloj y he tardado hora y media en la compra.

Nadie, excepto yo pierde el tiempo que ha ahorrado durante una compra maratónica, mirando productos de limpieza…