viernes, 8 de junio de 2007

Mis tres hermanas


CARMEN - MI DESESPERANTE HERMANA MAYOR

No se si lo he dicho, pero soy la cuarta de cinco hermanos. Tres chicas y dos chicos. Siempre me he creído algo especial, primero porque nací después de que mi madre perdiera a un bebe en su octavo mes de gestación y segundo porque vine a este mundo dos días después de que mi abuelo materno falleciera y en el mismo hospital. Eso es lo que pienso a veces. Otras, que son mas...es que estoy como una puta cabra…

Para que sepan porque cuento lo que cuento, diré en mi defensa, que hasta el 2004 yo era una tía despreocupada de 40 años, llevaba mi sueldito a casa, comia lo que mama hacía y los fines de semana limpiaba y me iba de juerga. Recién cumplida la cuarentena, al siguiente año -menos mal que celebre esa fecha memorable un 19 de diciembre-, a mi madre le dio un infarto cerebral, luego al año siguiente mi padre falleció de un cancer y mi hermana ingreso en la unidad de “reposo” de la planta de psiquiatría, al mes de este suceso. Y por favor... que cuando digo reposo no es una burla, ya que visitaba a mi hermana casi a diario y lo presencie en vivo y en directo. No tienen que hacer la cama, no hay que limpiar la habitación, nada de comerte el coco con los menús diarios. O sea, como un hotel de cinco estrellas, pero cerrado con llave.

Mi vida cambio radicalmente, en ese corto espacio de tiempo y eso sin pasar por Antena Tres y como de toda la vida, me he considerado una especie animal más de los que habitan en el planeta Tierra y en el National Geografic (que veo de vez en cuando, no siempre como dicen otrossssssss), hablan de aquellas especies se adaptan a su entorno para sobrevivir lo mejor posible, pos alaaaa! a adaptarse tocaaaa.

De repente he pasado de ser hija y hermana, a convertirme en “madre superiora”, porque la casa se ha convertido en un convento y no hablo metafóricamente. Llego a casa del curro a las seis y media de la tarde (eso si no paso por el MER-CA-DO-NA), preparo la cena a mama, la ayudo a acostares, la arropo, le coloco las almohadas y le doy el besito de buenas noches. Luego recorro toda la casa, comprobando que no quede loza en el fregadero y que nada este fuera de su sitio (una compulsión que tengo que ya contaré cuando hable de mi). A las ocho o nueve de la noche como mucho, toque de queda. Y que no se me ocurra salir a coger aire a la puerta de la calle, porque mi señora madre, aun con su capacidad auditiva a menos del veinte por ciento sin audifono, no ha perdido sus dotes detectivescas y me pone a caer de un burro.

Como siempre, me enrollo y no hablo de quien tengo que hacerlo. Hoy le toca a mi hermana Carmen María, la mayor de las chicas. Hace tiempo que me he dado cuenta, que en casa a todos nos falta o nos sobra algún que otro tornillo, incluyendo a La Chiqui (mi bichon maltes), pero lo de mi hermana Carmen es mucho pa el body. Pase que esta diagnosticada como discapacitada mental por su enfermedad (cosa que no asumía hasta los 38 años), pero coño, para chismear del vecino si que está muy bien, o para gastarse media paga en zapatos y complementos, que no le da tiempo a estrenar, porque esa es otra:

- Mar, lo que esta de moda ahora son los complementos - dice mi hermana.
Y dia si, dia no la veo con una bolsa, llena de pendientes de todos los colores, colgantes, zapatos, bolsos y un largo etc.
Tiene la cochina suerte de que se han puesto de moda, las tiendas de "Todo a 1€", los Chinos y otras parecidas y ella con solo 10 euros se complementa perfectamente. Un día de rosa... otro día de azul... otro de verde…. y así sucesivamente.
- ¡que reloj mas bonito, que fashion! ¿Cuánto te costo?.
- cinco euros
- ¿Y donde lo compraste?.
- En Gitana.
- Joder¡¡¡ y no te acordaste de mi?.
- Era el último.

Y una mierda!. Lo que pasa es que mi hermana se asemeja en esto a mi señor madre, que parece que pertenecen a la "Cofradía del puño cerrado". Si no te llega a convencer con eso te suelta otra que te remata

- Es que tengo que ahorrar para cuando me revicen la vista poder comprarme unas gafas nuevas

Yo me pregunto ¿por cinco cochinos euros va a dejar de comprarse unas gafas?. Mujer, si estoy dispuesta a darselos.

Carmen nunca come lo suficiente, no duerme lo bastante y a trabajado más que nadie en está vida, incluyendo a mi madre, que es mayor que ella y por logica matematica a laborado más. Menuda cara!. Como a mí se me ocurra decir que he tenido mala noche y casi no he pegado ojo, va y suelta:
- Yo tampoco dormí bien anoche.
Pero ¿qué dices condenada?. Si yo me dormí sobre las once o doce de la noche y tú estaba ronqueteando desde las ocho y media. ¡Que tuve que aumentar el volumen del DVD, porque parecía una concretera haciendo horas extras!.

Ella es mucho. Siempre quejandose. Si a mi me duele la cabeza, a ella le duele más. Si tengo gases y me tiro un pedo, ella me bombardea, porque “no se que comi que me dio gases y no los puedo expulsar”. ¡Pues si los llegas a expulsar bonita!. Últimamente se le ha metido en la cabeza que se va a extirpar el colon, porque no da de vientre lo suficiente, joder…joder…Que no digo los sonidos que escucho cuando entra en el baño…porque no se si existira onomatopeyas lo suficientemente descriptivas.

- Tengo caca retenida – susurra para que solo la escuche yo.
- Hoy no he hecho suficiente caca, me queda más. Kilómetros y kilómetros.
Y hora si y hora no, se escucha a lo lejos el sonido de la expulsión de las desposiciones casi líquidas saliendo por el ano de mi hermana a la velocidad de la luz, o sea, en la jerga del puelbo, una gran cagada.
-¡¡PON-PON-PON-FFFFFFFFRRRRRRRRRRRRRRREEEEEEEEEE-RUON-PEFRE…PONPON!!!

A medio día y antes de volver al trabajo, me gusta acostarme en la cama de mama, para descansar un poco y para que también mi madre temple los nervios, ya que mi hermana tiene tomado a perpetuidad el lado derecho de la cama (antes era el lado de papa) y no deja de darle el coñazo, hablandole cosas sin sentido y a baja voz, cual espia de la KGB y que mi madre que esta sorda no entiende. La señorita, no se si por celos o por molestar, se transforma en pescadera ambulante. Eso si, sin megáfono. ¡Dios mió! Es que con la puerta de su habitación cerrada, con la televisión encendida y el volumen casi al máximo, se escucha lo que dice. No se le entiende muy bien, todo hay que decirlo, pero se escucha algo así como…

- ¡¡¡¡¡¡¡¡…aca …tenida…!!!!!!!
- ¡¡¡¡¡¡…arriga…n…usta..!!!!!!!
- ¡¡¡¡¡¡…asar…con … iguel..ose…!!!!
(Traduzco.... ¡tengo caca retenida! ¡Esta barriga no me gusta!¡Me voy a casar con Miguel Bose!)

Y como no le pongas interes a lo que dice, lo hace peor, sube los decibelios a un limite insospechado, que si denunciara a mi hermana por atentado acústico, creo que la demanda se admitiria a tramite. Al finalí estoy yo haciéndole la competencia a ella, gritando como una loca y dándoles carnaza a los vecinos para que hablen de mí.

- Carmen. Como sigas gritando, te doy una patada en la boca, que te van a empastar la dentadura postiza,- le da igual. Sigue hablando. Y vuelta con la caca retenida. Su fantástica boda con fulanito de tal…

- Carmeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeen!!!!. ¡¡Que te calles ya coooooooooooooñooooooooo!!

Y ahí despierta la fiera que hay en mi…y como se que esta enferma y para no llegar a males mayores...me levanto de la cama, me subo al coche y entro a trabajar media hora antes…


MARIA Y SU QUISTE

Mi hermana María es la menor de nosotros. Lleva siete años de “feliz” matrimonio con Javier, pero por como discuten parece que llevan 20. Siempre están a la greña y por la menor tontería. Yo intento aconsejarla, pero joder, ¡Qué yo no se lo que es estar casada!. ¿No se han dado cuenta aún por qué decidí quedarme soltera?. ¡Pues claro!. Pa evitar los problemas de la vida marital.

Durante todos estos años, María no ha quedado embarazada, no se el motivo, pero, con lo que le esta pasando a fecha de hoy, mejor se hubiese quedado preñada. Cuando estas embarazada, y por lo que he oido, llegan los 9 meses (o las 41 semanas) y tienes un bebe. Mi hermana que es muy especial en todo, lo que tiene es ¡un quiste!.

Desde que se lo diagnosticaron, no para de hablar de él (lo mismito que un embarazo). ¡Que hasta me enseña las ecografías!. Y como en los embarazos, no me entero de nada. Esta cansada por el quiste, no puede dormir de lado por el quiste. ¿Hacer esfuerzos? Imposible. No se como se las apaña para tirarse un pedo, o para hacer la caquita. Cuanto más leo lo que escribo, mas se me asemeja a un embarazo. Lo último ha sido, ponerle nombre al susodicho nodulo. “Garbancito”, ¡ya les vale!

Luego está el histérico de mi cuñado. Según me cuentan fuentes fidedignas, (mi hermana), esta que se sube por las paredes. Normal, un cuerpo extraño dentro de ti, es como el Alíen del Octavo Pasajero. Que si “cuando te quitan eso”. Que si “van a esperar que se haga más grande”…ya se…ya se, que no es tema para bromas, pero joder, es que cuando me habla, me imagino al quiste saliendo de mi hermana, como un bicho extraterrestre.

El lunes por la tarde y después de venir del MER-CA-DO-NA, me llama mi hermana, para decirme que había ido al Ginecólogo, este le había quitado importancia al asunto diciéndole que le medía 3’7 cm., y que fuera después de que le viniese la regla tres veces. Mi hermana se quedo pasmada, ¡como que no es nada!.¡Si la otra vez medía 3’5!. Vamos a ver María, ¿y si la regla pa medir estaba antes mal?. De todas formas, si no estas de acuerdo con el diagnostico de un especialista, lo más normal y sobre todo, en este caso, es ir a otra para que te den una segunda opinión, que después de lo de mama me he convertido en experta.

En fin… entre una cosa y otra, me dice que esta planeando un viaje para Noviembre o Diciembre de este año a Argentina. Quince días de relax, para olvidarse del quiste, como si lo pudiera dejar en su casa durante las vacaciones y el más difícil todavía es que si la operan, se pega el viaje con puntos y todo. Pero, ¿no me dijo que no la iban a rajar? De locos.

Por lo que veo, no hay nada más entretenido que complicarse la vida. Supongo que por eso mi hermana sigue casada, porque los problemas para ella son la sal y la pimienta.


LUCRECIA : MAS QUE UNA CUÑADA UNA HERMANA

Jeje.. Ahora le toca a la Lucre, mi cuñada, esa que se caso con mi hermano a los diecisiete años -pobrecita, no sabia en que familia se iba a meter-.

Mi cuñada es la típica componente de una familia numerosa. Chillona. Supongo que entre tantos hermanos, era la única manera de dejarse oír y Dios me coja confesada, porque en cuanto lea esto me mata.

Al principio no la tragaba, porque era mimosa al cien por cien. Escondía las cajas de bombones para no darnos a mi hermana pequeña ni a mí y cuando quedo embarazada de su primogénito, las cajas de mandarinas volaban. Cuando se lo he recordado ahora de mayores, ha tenido la deferencia de ponerse colorada al decirme:

-¡Que egoísta…que glotona!
Aunque no tarde mucho tiempo en justificarse....

-¡Mujer! Es que era apenas una niña.

Pienso que debe ser chungo irte del lugar donde naciste, dejar atras a tu familia y entrar en un ambiente desconocido y más en plena adolescencia, así que como de toda la vida me ha tocado el corazón y el alma los animalitos desvalidos (y así es como la ví durante un tiempo), me decidí a "adoptar" a mi cuñada.

Me convertí en su conejillo de indias cuando hizo el curso de peluqueria en C.C.C. y gracias a ella, fui la primera de clase en el instituto que llevo mechon decolorado. Cuando mi sobrino tenia apenas dos años, empezo a trabajar en serio en una peluqueria del barrio, donde le pagaban cuatro perras, mientras sacaba el trabajo al resto del personal. Yo me encargue de cuidar a mi sobrino Luisito, recogerle de la guardería, darle la merienda, en fin…me convertí con dieciséis años en lo que ahora llaman canguro, eso si, de gratis.

Lucrecia, es de los componentes de mi familia a la mas que veo durante la semana. Casí todos lo días –por no decir todos- prepara el almuerzo en casa de mama, ya que estan rehabilitando su casa.
Hoy sin ir más lejos me encontré con un potaje de rancho y una tarta de galletas, nata y piña. ¡mmmmmmmmm¡. Pero lo anecdótico no es el caldero de fideos con judías, sino lo que dijo mientras yo fregaba la loza de una vecina algo impertinente que vive frente su casa.

- Viste que ayer estaba en la ventana esperando que pasaras con el coche ¿no? Pues cuando entre para mi casa, suena el telefono. Era el vecino de enfrente, el marido de doña fulanita… El muy subnormal me dice que le había cerrado la ventana pa no saludarlo…- y siguió despotricando- … y luego me pasa a la gilipollas de la mujer, que me pregunta cuando podía ir a la casa a verle un uña del pie que le dolía. ¡Vayaaaaa¡. Después de una semana de arreglárselos. Lo que quiere esa, es que vaya pa alegar y criticar de todo el mundo. ¡Lo que me faltaba! ¡yo no tengo otra cosa que hacer ¡… ¡que se vaya al…!

Yo me rió con ella, no de ella, porque siempre tiene algo que contar. Inclusos se burla de sus propios males. Padece de hipertensión. Si coge muchos nervios y ante una situación dramatica, le da una crisis de histeria y se le engarrotan las manos hacia dentro. Últimamente se quejaba de dolores en el hombro izquierdo y su doctor de cabecera le mando hacer unas pruebas, para descartar posibles hernias discales, pues después del diagnostico, le duelen hasta las pestañas.

-¡Si estoy así con 46 años! ¿Qué me espera cuando tenga 60?

Lo dicho, para mi es como una hermana más y para mi madre como una hija. Ella es la “culpable” de que mi madre este tan mimosaaaaaaaaa…..

–… Y ahora te comes las natillitas y luego la frutita- y le espeta la cuchara sopera a rebosar de natillas, que si mi madre se descuida, le toca la campanilla, mientras sigue hablando conmigo. Mama la mira entre asustada y divertida, haciendome gestos, hasta que Lucre se da cuenta de lo que esta haciendo y empieza a reirse.

Y si no…
-¡a ver! ¡Un puñadito de avellaaaaanaaaassss!

-¿Ves Mar? Con migo se lo come todiiiito…Es que yo se como conquistarla -me reestrega en las narices la muy capulla-.Como siga comiendo así de bien, termina por cuidarme ella a mi.

Luego esta las conversaciones sobre su marido, mi hermano, algunas subiditas de tono.

-El pobre…ya no da mas de si…se esta volviendo senil – y todo porque se olvido un día de un recado que le dio – si yo digo… que penita me da mi mariiioooo.

Y con mi madre.

-Como tu hijo se beba dos copas…luego no sirve – eso a pleno pulmón y con señas- se queda en las seis y cuarto…jajajajajajajajajaj.

- Y como me oiga, ¡kkggggkkk! me coge por el cogote y me lo retuerce –

Y va mi madre y salta…
-Igualito que el padre. Cuando venía pimplado, no podia..chucuchucu.

Mi cuñada abre los ojos como platos y se rie, yo igual y mi madre tan pancha.

Con mi hermana Carmen es igual, bromea, le dice alguna que otra cosilla verde.
- Carmen…¿tu a tu ex alguna vez…um um um um? y le hace por señas una fellacion.

Y ahí salta la beata de mi hermana.

- ¡Jesús Lucrecia no digas esas cosas!...
- ay que no…ese chupetito acabaito de lavar. No sabes lo que te pierdes

Lucrecia ayuda en la iglesia del barrio, mientras despotrica del nuevo sacerdote, para luego decir que le da pena el pobre. Dice que se le pegan todas las viejas, pero cuando se le muere alguna monta un drama.

En fin… ¿Qué más puedo decir?..
Gracias cuñada por elegir entre todos los hombres de la tierra, a mi querido hermano como marido….