lunes, 11 de agosto de 2008

Lo que a veces leo

El fin de semana pasado mi hermano mayor me telefoneo, para hablarme de un libro del que había oído comentarios muy buenos en la cadena Ser. Se trataba del libro titulado MIL SOLES EXPLENDIDOS del escritor afgano en el exilio, Khaled Hosseini. Me pregunto si lo tenía y le contesté que no. Como me hablaba tan bien de este libro, le dije que puestos así, porque no me lo compraba y sin cortarme un pelo y por la cara le espete donde podía conseguirlo sin ningún problema. “…en El Corte Ingles fijo que lo encuentras” Mi hermano que es un sol cuando quiere, se fue a ese centro comercial y además de este titulo me trajo el libro anterior “Cometas en el cielo”, del que se ha hecho un película. Yo puedo decir que el único gran vicio que tengo es la lectura. Soy una lectora empedernida y tengo lo que yo llamo “mis etapas de lectura”. Normalmente lo que más consumo es literatura romántica histórica, aunque me gusta intercalar con novelas basadas en hechos reales que transcurren en países árabes, asiáticos, africanos, casi todos con un nexo común, el trato a las mujeres en sociedades rurales machistas.
He leído la trilogía de “Sultana”, “No sin mi hija” y “No sin mi hija II”, “Vendidas” que me desgarró el alma. “La Reina de los bandidos”, que relata la vida de Phoolan Devi, casada siendo una niña y vejada por su marido y por otros como este. Esta mujer fue líder en una banda de bandidos en India entre los años 1981 y 1983. Pasó 11 años de su vida encarcelada sin que se celebrara juicio alguno, para luego pasar a la vida política como diputada durante diez meces, defendiendo los derechos de las mujeres de las castas mas pobres de su país y por eso me pareció interesante leer este libro.
Relata la vida de dos mujeres afganas de edades dispares (una diferencia de 18 años), que victimas del destino, convivieron en el mismo hogar y con el mismo hombre durante años. Vivieron los cambios de gobierno tan radicales que sufrió Afganistán, pasando de una etapa monárquica , a un régimen comunista donde las mujeres disfrutaron de un cierto grado de libertad, sobre todo aquellas que vivían en Kabul, a la mas terrible persecución misógina por parte de los talibanes, impulsores de la ley islámica. Consideradas por los talibanes poco menos que animales, no tenían acceso a la educación ni al empleo, dependiendo totalmente de un familiar masculino y abocadas a la miseria y el hambre con la falta de este (viudas).

Hay en el libro, un pasaje que describe la doble moralidad de algunos hombres, por ejemplo el esposo de Miriam y Leila, que es como se llaman las protagonistas, que las obliga a ponerse el burka aludiendo que no quería que fueran una tentación para ojos libidinosos, mientras el esconde en el fondo de un cajón de la mesilla de noche, revistas de carácter pornográficas.

Ayer por la tarde le dedique un poco de tiempo a la lectura del libro, pero tuve que parar, porque era tal la atrocidad y sufrimiento que se descubría en las páginas, que pensé que me iba a dar un ataque de impotencia, rabia e histeria, luego recordé, porque había dejado de leer este tipo de literatura… Aún así recomiendo la lectura de este libro, porque al menos a mi, me ha hecho pensar en lo afortunada que soy al vivir donde vivo y hacer medianamente lo que me da en gana.